Sara Beatriz Guardia. Edición.

Las mujeres en la independencia de América Latina

Lima: CEMHAL, UNESCO, Universidad de San Martín de Porres, 2010.

 

Presentación 

 

Desde 1808 hasta 1826, casi la totalidad de los territorios de América Latina se abocaron a lograr

su independencia del dominio español. Constituyeron hitos importantes en el siglo XVIII, la rebelión

de José Gabriel Tupac Amaru en el Virreinato  del Perú (1780-1781), la insurrección de los hermanos

Katari en Potosí, Bolivia (1781),  el levantamiento de los comuneros del Paraguay, (1717-1735) y

del Virreinato de Nueva Granada, Colombia, (1781), entre otros.

 

El 25 de mayo de 1809, se constituyó la primera Junta que rompió con España, y significó el Primer

Grito Libertario de América luego del levantamiento popular que depuso a las autoridades de la

Audiencia de Charcas en la ciudad de Chuquisaca, (Sucre - Bolivia). El 16 de julio, La Junta de La Paz,

nombró presidente al patriota Pedro Domingo Murillo, ejecutado el 10 de enero de 1810. El 9 de

agosto de 1809, en la ciudad de Quito, la Junta proclamó la soberanía del pueblo, y el 11 de octubre

de 1810 anunció la independencia de Ecuador. El 16 de setiembre de 1810, Miguel Hidalgo inició la

lucha por la independencia en el Virreinato de Nueva España, México. A partir de 1817, la guerra se

generalizó en toda la región.

 

El anhelo de libertad por la independencia y emancipación ha sido una constante en la historia de la humanidad a través de siglos de permanente lucha. Recubren todas las formas de subyugación:esclavos, masas explotadas, mujeres dominadas, pueblos oprimidos, pueblos colonizados. Significa

liberar al ser humano de aquello que le impide desarrollarse con total autonomía, sueño que ha animado a millones de hombres y mujeres a través de la historia.

 

En la independencia de América Latina las mujeres participaron de manera decidida, incluso en acciones militares y de liderazgo. Sin embargo, conquistada la independencia en el siglo XIX, los estados nacientes crearon a sus héroes nacionales. Durante este proceso surgieron y se perfilaron

los rostros de los hombres que habían forjado la emancipación de España, pero ninguna mujer mereció tal reconocimiento. Recién a finales del siglo XX la presencia femenina en el proceso emancipatorio, y en la construcción de las naciones empezó a tener registro en nuestra historia.

 

Este fue el motivo que nos congregó en el IV Simposio Internacional Las Mujeres en la Independencia de América Latina, y que ahora anima la difusión del primer libro que se publica en América Latina sobre el tema, producto de un esfuerzo colectivo que también se expresa en esta presentación.  

 

La participación de las mujeres, para Daniel Loarte, no ha sido siempre considerada en su adecuada dimensión, presentándose a las precursoras y heroínas en un segundo plano. El Bicentenario permite realizar un balance a la historiografía escrita sobre el particular y efectuar un acercamiento desde la perspectiva de género que contribuye a ir más allá de un mero seguimiento - que puede denominarse repetitivo o tradicional- a relatos históricos construidos desde el siglo XIX y del Centenario, los cuales exaltaron héroes y heroínas, con características definidas (o incluso definitivas) y sin cuestionamientos, debido a su sacralización, por ser considerados fundadores de la nación y de la patria. Son estas construcciones de personajes, magnánimos y sin tacha alguna, las que formarán parte esencial de la retórica de los discursos cívicos y patrióticos hasta la actualidad, los cuáles pueden brindar una visión sesgada de los actores y hechos históricos y constituirse en posiciones hegemónicas, bajo determinados discursos políticos.

 

Por tanto, son necesarias estas revisiones historiográficas para comprender la construcción de las mujeres que participaron en el proceso de Independencia de América Latina y el trasfondo político, social, histórico e intencional con el que fueron elaboradas dichos personajes. Una perspectiva de género, sin concepciones sesgadas ni excluyentes y sin prejuiciosas reivindicaciones, posibilitará ir más allá de conceptos comunes atribuidos a las mujeres en la Independencia, tales como las caracterizaciones masculinas o las acciones extraordinarias y repensar conceptos tales como patria,

nación e identidad.

 

Respecto de las mujeres en el discurso político independentista, Marieta Cantos Casenave  y Beatriz Sánchez Hita, señalan que los trabajos presentados en este capítulo dibujan el papel que se atribuye, o quiere dársele, a las mujeres a lo largo del XIX así como el rol que desempeñaron algunas damas en la convulsa sociedad en la que les tocó vivir. Todas estas cuestiones han sido hasta la fecha poco abordadas, por lo que los trabajos contenidos en este bloque suponen sin dudas un notable avance en las investigaciones sobre el género y su implicación en la lucha por la independencia, y de manera específica del lenguaje empleado para captar a la mujer y sumarla al proceso, sin olvidar cuál era la situación específica de la mujer en la sociedad de la

época y la proyección que tendrá posteriormente.

 

El inicio de los procesos independentistas en América Latina lleva aparejada una utilización concreta del discurso y los mensajes destinados a captar la atención de las damas, a las que se trata de implicar en el proceso de muy diversas formas: algunas de las que pertenecían a estratos sociales altos contribuyeron con sus tertulias a la difusión de una determinada ideología, y fomentaron la recaudación de fondos para equipar a las tropas;

otras tomaron parte activa en la lucha convirtiéndose luego en renombradas heroínas y unas pocas optaron por tomar la pluma e influir con sus escritos a sus congéneres. En este contexto la educación se plantea como un elemento imprescindible para el movimiento insurgente, y la prensa periódica en elemento fundamental para lograr asentar los principios de la independencia.

 

Para Edda Samudio, la construcción de la memoria histórica de la vida cotidiana de las mujeres y su participación durante los procesos emancipadores constituye un tema de interés relativamente reciente y embrionario en la historiografía americana. Las mujeres de esa época, con sus características particulares en cuanto a sus costumbres, creencias y actitudes, acordes con el estatus al que pertenecían en esa sociedad desigual, jerarquizada y jurídicamente de antiguo régimen, estuvieron inmersas en los convulsionados acontecimientos políticos del proceso emancipador. Proceso que no sólo alteró su cotidianidad con desolación, carencias, deshonor e impotencia sino que, también,  llevó a muchas de ellas, tanto principales como subalternas, a vincularse a los proyectos monárquico o independentista.  

 

Asumiendo el desempeño de diferentes roles, de acuerdo a las circunstancias que hacían necesaria su participación, adaptando su contribución en el caso de las patriotas, a la lucha libertaria con diversas formas de intervención y responsabilidades, manifestándose, en unos casos, de manera abierta y, en otros, en forma soterrada pero siempre en calidad de actoras fundamentales de la gesta libertaria de los países hispanoamericanos. Heroínas todas ellas, distinguidas y plebeyas, que merecen reconocimiento en las páginas de ese pasado legendario e imperecederamente memorable.

 

Según Renata Bastos da Silva, existe la necesidad de documentar la experiencia vivida como posibilidad de abrir nuevos caminos e interpretaciones de identidades femeninas a fin de que pueda emerger no sólo la historia de la dominación masculina, sino sobretodo los roles adquiridos de las mujeres como modo de  resistencia. El estudio de la cotidianidad se presenta así como un instrumento en la búsqueda de un nuevo conocimiento de los sujetos sociales, diferenciados y culturalmente diversos. Nuestra propuesta es la de contar la vida de mujeres que transformaron la práctica de su espacio doméstico en un espacio público, otorgándose la categoría de actores sociales.

 

Berta Wexler sostiene que las representaciones culturales e imaginarios de las mujeres durante la guerra de la independencia configuran una de las cuestiones que como historiadores, debemos abordar. Un  proceso complejo para demoler las construcciones del pasado, basadas en el poder, que justificaron posiciones políticas e ideológicas1. En la sociedad colonial el universo femenino fue en su gran mayoría  heterogéneo, de allí que nos planteáramos indagar sobre  las representaciones sociales que se construyeron resignificando a las mujeres.

 

La mayoría de ellas, cuando participaron de las contiendas  tuvieron atributos con alto grado de significación ideológica que muestran rasgos de inferioridad. Muchas de las tradiciones de los países latinoamericanos se apropiaron de contenidos imaginarios  de su propia identidad. Se transmitieron

 determinados cánones a través imágenes visuales significativas, en la etapa de formación de cada estado. Este imaginario emitió  en cada cultura,  en el siglo XIX, XX y XXI  actitudes, mitos, creencias populares creadas  por los hombres que reflejan distintas  etapas del pensamiento, la ideología y el poder en cada proceso histórico. Coincidimos con Mary  Nash  cuando ve el imaginario como el resultado de la trasmisión y difusión de un conjunto de representaciones que han conferido un significado  compartido2. Justamente por ello intentamos encontrar nuevas fuentes y maneras de interpretarlas, a través de la literatura, la iconografía  y el cine, cuyas imágenes en movimiento nos ayudan a mirar el pasado femenino y la iconografía  con una nueva mirada que es preciso descifrar3.

 

Sobre el reconocimiento o invisibilidad de la mujer en la lucha por  la independencia, Jaqueline Vassallo señala que el movimiento revolucionario iniciado por un centenar  de personas, terminó arrastrando consigo  a los demás sectores sociales, y toda América se convirtió en un campo de batalla. Por lo tanto, esta etapa marcó un antes y un después  en la vida de las personas.

 

Con la revolución las mujeres participaron en la política, de la que habían estado excluidas durante el período colonial. Las más pobres, a través de reuniones, o charlas en las pulperías; y las de sectores acomodados en tertulias, convertidas en espacios claves  de reunión organizados por mujeres, como Mariquita Sánchez de Thompson en su casa de Buenos Aires; Manuela Santamaría de Manrique - literata y humanista – en Bogotá, y la influyente  “Güera” RodríguezI en México. Pero a la par de estas mujeres, otras se convirtieron en figuras míticas, como Juana Azurduy, evidenciando las contradicciones de un discurso patriarcal que las concebía “débiles”.   

 

Sin lugar a dudas, la  historia androcéntrica que se escribió en América Latina no sólo invisibilizó  a las mujeres,  sino a muchos otros actores sociales.  Esta  historia oficial aludía exclusivamente a los “padres fundadores” convertidos en el paradigma de la nacionalidad y transformados en “próceres”. No es casual, entonces, que en el marco de las celebraciones del primer centenario se respaldara este pasado  construido, en el marco de  las

consignas “orden y progreso” propias de la ideología positivistaII. Un siglo después, este libro rescata las distintas formas de participación de las mujeres en la independencia, y las diversas maneras que la historiografía las invisibilizó.

 

Sonia Salazar, nos dice que las cartas constituyen una importante fuente para comprender el ambiente de una época, y que en contexto de la independencia existen en archivos públicos y privados, cartas escritas por mujeres que revelan además de sus intereses personales, “un medio por excelencia de transmisión de noticias públicas”*. Las mujeres definitivamente no estaban tan calladas como nos ha hecho pensar la historia tradicional.

 

Desde luego, a fines del siglo XVIII y principios del XIX, escribir era un privilegio de los varones. Tuvieron que pasar varias décadas para que existan escuelas para mujeres en los nuevos Estados y muchas más para que sea obligatoria. Sin embargo, hasta la actualidad los escritos de mujeres no han ocupado un lugar importante en la historiografía, y menos aún el género literario epistolar, eminentemente privado.

 

Pero las cartas de las mujeres constituyen una prueba del rol, muchas veces protagónico, que las mujeres tuvieron en las gestas libertarias y definitivamente de la ilustración de sus mentes. Desde la literatura, algunos autores analizan las cartas conjuntamente con las tertulias de la época, como los espacios, situados entre lo público y privado, en los que ellas ejercían su influencia. Constituye un desafío encontrar esas cartas, leerlas y

apreciarlas en el contexto de la historia de las mujeres. Nos permiten conocer sus actividades, en sus haciendas y negocios, sus hogares y la defensa de sus hombres y de sus familias, de su honor y buen nombre. Están allí para que nosotros los historiadores las validemos como documentos fehacientes de nuestra historia.

 

En la visión de la mujer en la literatura de los siglos XIX y XX, Ana García Chichester, sostiene que la literatura de América Latina durante el siglo XIX se distingue por el gran número de poetas y escritoras que comienzan a escribir impulsadas por la estética del Romanticismo. Narradoras de la talla de Gertrudis Gómez de Avellaneda, Clorinda Matto de Turner, Mercedes Cabello de Carbonera, Juana Manuela Gorriti y otras irrumpen en el mundo (masculino) de las letras. Para traspasar “las fronteras de una actividad convencionalmente masculina” estas escritoras no solamente tienen que adoptas las normas literarias ya  establecidas sino que se ven forzadas a “borrar la singularidad de su experiencia histórica y personal dentro del espacio cerrado del hogar.”[1]

 

Es así que la mujer del siglo XIX ajusta su escritura a temas preestablecidos; la experiencia femenina expuesta desde una perspectiva en la cual la mujer puede dejar de ser el objeto literario se ha de relegar hasta el siglo XX. Tal perspectiva cede al cambio comenzando con Alfonsina Storni, Teresa de la Parra, María Luisa Bombal, Alejandra Pizarnik y otras. A partir de sus obras la mujer adquiere su propia voz como sujeto literario. Temas como la

amistad y solidaridad entre mujeres, el activismo político y social, el deseo sexual femenino o la ausencia del padre en la familia fragmentan el discurso masculinista. Hablar con voz de mujer significa para estas autoras “socavar la apropiación del discurso” para inmiscuirse en territorios de previo dominio masculino.[2] A medida que avanza el siglo XX y como respuesta a la represión social y política en el continente, las escritoras latinoamericanas subvierten los códigos y estilos preestablecidos en la expresión escrita para “transgredir lo prohibido[3] y plasmar su experiencia individual y colectiva. El texto literario se convierte así en testimonio de una visión anteriormente reprimida y de un lenguaje que expresa tanto la realidad como la imaginación de la mujer.

 

 

Sara Beatriz Guardia

Lima 15 de octubre, 2010

 

 

Conferencia Magistral

Repensar la Independencia de las Américas desde nuevas perspectivas. Invitación a una relectura.

Edgar Montiel. UNESCO                                                                                                                        

                                                                                                                            

I.     Las mujeres en la Independencia de América Latina. Heroínas y luchadoras por la libertad                                                                                       

Reconociendo las huellas. Micaela Bastidas y las heroínas de la Independencia del Perú.

Sara Beatriz Guardia. Universidad de San Martín de Porres. Lima, Perú. CEMHAL.                                                          

                                                                                                                   

Manuela Cañizares: La Heroína Callada.

Daniel Loarte. Instituto Riva Agüero. Pontificia Universidad Católica del Perú. Ministerio de Relaciones Exteriores del Perú. .                                                                           

 

Gertrudis Bocanegra y el proceso de construcción de la heroína en México.

Moisés Guzmán Pérez. Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, México.             

                             

Los rostros de Xaviera Carrera. Heroína de la Independencia. 

Nanda Leonardini. Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Lima – Perú.                       

                                                                                                                  

Gregoria Battallanos, la Goyta: Mujeres en el campo de batalla en la independencia de Bolivia.                                                                             

Esther Aillón. Universidad Mayor de San Andrés. La Paz - Bolivia.                                                                                 

 

Nación, Activismo y Solidaridad: Poetas mambisas durante las Guerras de independencia de Cuba.

Ana García Chichester.   University of Mary Washington, Estados Unidos.                              

 

As mulheres nas lutas poa Independência do Brasil: contestando a História Oficial.

Miriam dos Santos. Universidad Federal Rural de Río de Janeiro, Brasil.

 

Las mujeres zacatecanas y la Revolución de Independencia en México.

Emilia Recéndez Guerrero. Universidad Autónoma de Zacatecas, México 

                                                                                                                             

II.   Género e independencia en la historiografía de América Latina                                            

  

La inscripción de la matria: discurso de género, memoria histórica e identidad de la heroína como alegoría de la construcción de la nación.

Fanny Arango-Keeth.  Mansfield University of Pennsylvania, Estados Unidos. 

      

Las mujeres de los sectores subalternos en la mentalidad de la elite merideña en los albores de la independencia de Venezuela.

Edda O. Samudio A.  Universidad de Los Andes, Mérida, Venezuela.                                                                                                                  

 

Días de pasión… Juana derrota hombres y derrumba prejuicios.

Berta Wexler.  Universidad Nacional Rosario, Argentina. María Edit Oviedo. CLADEM, Bolivia.

 

Venciendo a la Mujer: Luisa y Pola en Guerra por la Independencia.

Dunia Galindo. Centro de Investigaciones Teatrales. Caracas, Venezuela

 

III.  Las mujeres en el discurso político independentista                                                                        

 

Una lectura sobre la condición femenina en la Argentina del siglo XIX y la emergencia de posibilidades para su transformación.

Teresa M. Mestre - Adriana Ureta. Universidad Nacional de  San Juan, Argentina.

 

Contribución a los derechos humanos de las mujeres y su inclusión en la Esferas ilustradas de la sociedad novogalaica (Occidente de México siglo XIX).

Carlos Fregoso Gennis.  Universidad de Guadalajara, México.                                                                                                            

 

Un discurso independentista para las señoritas mexicanas del siglo XIX.

Olga Martha Peña Doria.  Universidad de Guadalajara, México.                                                                                                        

 

La mujer en el discurso político independentista.

Rosa María Gutiérrez García. Universidad Autónoma de Nuevo León, México.

                                                                                                                                                                                

Gestos, conductas y ademanes: la corporeidad femenina en la independencia mexicana.

Cándida Elizabeth Vivero Marín. Universidad de Guadalajara, México.                                                                                                 

 

Griegas y Romanas en la Independencia de Colombia (1810-1816).

 Ricardo del Molino García. Universidad Externado de Colombia.

 

IV.   Vida cotidiana, espacios de sociabilidad, mentalidades y opinión pública durante el proceso de emancipación.

 

Mujeres y vida cotidiana en tiempos de cambio en el Río de la Plata.

Silvia Tchordonkian. Universidad de Buenos Aires, Argentina.                

                                          

Mujer y Guerras de Independencia. Paralelismos entre la actitud de la mujer por la conquista de la opinión pública en España y América (1808- 1814).

María Román López - Beatriz Sánchez Hita - Marieta Cantos Casenave. Universidad de Cádiz, España. 

                                

Duas Gerações de Damas na Independência Brasileira.

Renata Bastos da Silva – Lia Faria. Universidad del Estado de Río de Janeiro,    Brasil.   

 

Salve a la Patria, salve mi vida!! Violencia familiar en un escenario de lucha por la libertad.

Ana T. Fanchin. Universidad Nacional de San Juan, Argentina.

 

V.    Representaciones culturales e imaginarios de las mujeres durante la guerra de  independencia 

 

La Batalla de Ayacucho de Teofila Aguirre. Una pintora peruana tras las huellas de la historia americana.

Sofía Pachas Maceda. Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Lima - Perú.

 

¿Pueden existir las heroínas en celuloide? La representación de las mujeres Insurgentes en el cine mexicano. (1934-1991).

Julia Tuñón. Dirección de Estudios Históricos, INAH, México.

 

Santa Librada: memoria y olvido de la representación femenina de la Libertad en Colombia (1813-1960).

Jaime de Almeida. Universidad de Brasilia, Brasil.                                                                                                                      

 

La imagen de la mujer baiana y brasileña en la lucha por la independencia del Brasil: Joana Angélica y Maria Quitéria.

Suely Reis Pinheiro. Universidad Federal Fluminense /Universidad del Estado de Río de Janeiro, Brasil.  

 

VI.   Reconocimiento o invisibilidad de la mujer en la lucha por la independencia

 

Roles y participación femenina en tiempos de guerra. San Juan de la Frontera.

Patricia Sánchez. Universidad Nacional de San Juan, Argentina.    

                                                                                                                     

Algunas notas sobre las mujeres y los primeros años de la Revolución en el Río de la Plata

Jaqueline Vassallo. UNC - Argentina.

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La Güera Rodríguez, a doscientos años de la independencia de México.

María Guadalupe Sánchez Robles. Universidad de Guadalajara, México 

                                                                                            

VII.  La mujer vista por sí misma: diarios, cartas, y otros escritos                                             

 

La pluma y el laberinto: Autobiografía y representación de Manuela Sáenz.

Claudia Luna. Universidad Federal de Río de Janeiro, Brasil.                                                                                                                              

 

En el amor y en la guerra. La correspondencia íntima entre Simón Bolívar y Manuela Sáenz.

Manuel Espinosa Apolo.  Investigador independiente.                                                                                                          

 

Javiera Carrera: ¿Madre de la Patria?

Ximena Azúa. Universidad de Chile, Chile.

                                                                                                                              

VII.  Visión de la mujer en la literatura del siglo XIX y XX                                                        

      

Ficciones de la historia. Zubiaga de Gamarra.

Mary G. Berg.  Brandeis University, Waltham, MA, Estados Unidos.                                                                                                                

 

Género, Independencia y litoral marítimo en Juan de la Rosa: novela histórica fundacional de la nación boliviana.

Camila Bari. Westminster College. Pennsylvania, Estados Unidos.

 

Las heroínas mexicanas en el siglo XIX: una reflexión entre la historia y la literatura.

Elsa Leticia García Arguelles. Universidad Autónoma de Zácatecas, México.                                                                                                    

 

Sentinela avançada – Anita Philipovsky

Luísa Cristina dos Santos Fontes. Universidad Federal de Santa Catarina-Universidad Estadual de Ponta Grossa, Brasil.

 

Lola Montenegro. La Romántica Centroamericana

Guillermina Herrera Peña. Ex Rectora de la Universidad Rafael Landívar, Guatemala.

 

 

    


1 Teresa Suárez. “Félix Barreto y la construcción de un mito. Gregoria Pérez de Denis (1764-1823)”. Historiografía y Sociedad. Discursos, instituciones, identidades. Santa Fe, 2009. p. 144.

2 Mary Nash. “Representaciones culturales, imaginarios y comunidad imaginada en la interpretación del universo intercultural”. Panel 1. Identidades e imaginarios como práctica intercultural.

3 Ana Lidia García. “Historia de las mujeres en el SXIX: algunos problemas metodológicos”. Bartra, Eli. Debates en torno a una metodología feminista. México, 2002, p. 213.

I María Sáenz Quesada. Las cuentas pendientes del Bicentenario. Buenos Aires: Sudamericana, 2010. p. 98.

II Ibídem. p. 294 

* M.C. Arambel Guiñazú y C. E. Martín, “De la oralidad a la escritura”. Las mujeres toman la palabra. Escritura femenina del siglo XIX.  Madrid: Iberoamericana, 2001.

[1] Guerra Cunningham, Lucia. “Splintering Darkness: Latin American Women Writers in Search of Themselves.”

http://www.u.arizona.edu/~rmendoza/assets/downloads/guerra_rite_passage.pdf

 

[2] Jehenson, Myriam Yvonne. Latin-American women writers: class, race, and gender. Albany: State University of New York, 1995.

[3] Agosín, Marjorie. Secret Weavers: Stories of the Fantastic by Women Writers of Argentina and Chile. New York: White Pine Press, 1992.